EULBERG, ELIZABETH
«Los chicos y las chicas pueden ser amigos. Yo solo digo que es perfectamente posible que un chico y una chica sean amigos. Nunca he entendido cuál es el problema. O sea, sí, hemos tenido que soportar un montón de preguntas estúpidas: "¿Estáis juntos?", "Pero algún rollo habréis tenido, ¿no?" Bueno, vale. Sea como sea, reconozco que no todo ha ido como la seda. Hemos tenido algún que otro problemilla. Vale, bastantes problemas. Pero mira cómo ha acabado todo. Cuando llegué al colegio, ambos dimos por supuesto que no volveríamos a intercambiar palabra después de aquel primer día. Sobre todo tú, porque enloqueciste por mí en cuanto me viste. Abundan los adjetivos para describirme: genial, fuerte, viril? ¿Quieres que siga?»
Digamos que Macallan y Levi fueron amigos a primera vista. Todo el mundo dice que chicos y chicas no pueden ser amigos de verdad, pero ellos lo son. Y mucho. Quedan después del instituto, comparten miles de chistes que solo ellos entienden, sus familias están superunidas? Levi y Macallan solo son amigos, y están felices así.
Pero, claro, los chicos no piden salir a Macallan porque piensan que está con Levi y Levi pasa tanto tiempo con ella que no le queda tiempo para sus novias. Así que un día comenzarán a preguntarse si no estarían mejor juntos. Aunque quizá eso complique demasiado su relación.