BARCELO,ELIA
El día en que iba a ser asesinado, Matthias Schroll se despertó mucho antes del amanecer con la boca amarga y el pecho oprimido por la angustia. Estaba de un humor de perros, como casi siempre, y el hecho de que esa noche fuera el estreno de La Flauta Mágica, su primer estreno en Austria, no contribuía a mejorar la situación... Apenas quince horas después, tres muchachas encontrarían su cadáver, con una extraña mueca de sorpresa en el rostro y el papel de un bombón de café en la mano.