JÜRG AMANN
Nunca había tenido una sensación tan fuerte como cuando Las benévolas, de Jonathan Littell, apareció en el mercado alemán hace unos años: empatía positiva con un criminal de guerra nazi en forma de novela. Poco antes había accedido a las notas escritas por Rudolf Höss, el comandante de Auschwitz, mientras preparaba en Viena una obra de teatro. Más allá de aquellos testimonios, más allá de la impactante confesión, di con una respuesta para mi proyecto desde la realidad. Höss escribió aquellas notas de manera fría, sin ningún arrepentimiento, durante el tiempo que permaneció recluido en la prisión de Cracovia entre su arresto al final de la Guerra y la notificación de su sentencia de muerte dictada por el Tribunal Supremo polaco. Redactó un documento de casi 300 páginas, del que conseguí extraer la esencia. El resultado es un monólogo de un centenar páginas. No hay nada inventado, no se ha añadido ni una palabra, ninguna frase ha sido alterada; todo coincide con la vida que Rudolf Höss vivió y perdió. Jürg Amann