JUAN MANUEL MÁRQUEZ
Nada más despertar, Fidel ve a Julia dormida y desnuda a su lado y se encuentra mirando unos gayumbos tirados en el suelo y pensando en que ha soñado con los de Pablo Iglesias. ¿Hay alguna relación entre la realidad y su sueño? A raíz de este incidente aparentemente banal, el protagonista, cual Tristam Shandy moderno, va desgranando progresivamente sus divagaciones incesantes, inteligentísimas, riquísimas y humorísticas. Fidel tiene sus ideas sobre todo. La política, el amor, la filosofía, la literatura y otros grandes temas van desfilando ante los ojos del lector que, hechizado, asiste al hecho prodigioso de que, a partir de la relación de esos gayumbos con el haber soñado con Pablo Iglesias, el narrador despliega en este magnífico texto una vida entera con arte inigualable. A veces ?muy raras veces sucede? uno se topa sin esperarlo con un diamante literario y reconoce en él el sorprendente destello del genio. Estamos ante la revelación literaria del momento. Pasen y lean, señores. Además de disfrutar con el humor del irrepetible Fidel, el poso que dejará en ustedes esta obra será indeleble?