AUDEN, W.H.
Se extinguió en lo más crudo del invierno: los arroyos estaban congelados, los aeródromos casi desiertos, y en las plazas la nieve desfiguraba las estatuas; el mercurio se hundió en la boca del día moribundo. Los instrumentos de que disponemos coinciden en decirnos que el día de su muerte fue un día oscuro y frío.