MAÑERU, MARÍA / EQUIPO EDITORIAL
Vivir en un ambiente urbano nos hace añorar muchas veces el contacto directo con la naturaleza. Una vía de escape al asfalto, las prisas y el ruido de la gran ciudad es cultivar un pequeño espacio verde, un huerto que nos comprometa con el medio ambiente y nos convierta en consumidores más responsables en busca de lo sostenible. Solo necesitamos unos conocimientos básicos, algo de espacio, tiempo y paciencia para ir aprendiendo de nuestra propia experiencia.