JOSE LUIS OLAIZOLA
«A este jardín, que más bien era un bosque, se accedía desde el piso principal del palacete a través de un puente de hierro forjado artísticamente. Por su gusto, Rafaela lo hubiera hecho más rústico, de madera de castaño, pero su marido dijo que había de ser hierro
»
Finales del siglo XIX. Bilbao es una de las ciudades más prósperas de España. La riqueza, el desarrollo industrial y el crecimiento de la población hacen de ella un sitio muy atractivo para invertir, pero también la prostitución, el juego y las peleas son el pan nuestro de cada día. En este ambiente, una mujer excepcional comenzará a brillar con luz propia, Rafaela Ybarra.
Sistemática defensora de las pobres muchachas que llegan a Bilbao buscando un futuro mejor, Rafaela no dudará en ayudarlas para que no caigan en la marginación. Junto a su esposo, José de Vilallonga, presidente de los Altos Hornos y unos de los hombres más prósperos de la ciudad, invertirá muchos de los beneficios de la empresa en obras benéficas y en la creación de instituciones comola Congregaciónde los Santos Ángeles Custodios, pero para ello deberá enfrentarse al sistema
Gracias a esta inspiradora novela, conoceremos una época inigualable y a una mujer maravillosa que fue beatificada por Juan Pablo II como reconocimiento a su infatigable labor.