CAVELL, STANLEY
Conocido como uno de los filósofos norteamericanos más importantes de la actualidad, Stanley Cavell es también un estudioso del cine. Sin embargo, y como era de suponer, los abordajes que realiza en este sentido no son en absoluto convencionales. Por un lado, sus minuciosos análisis y sus asombrosas asociaciones crean algo así como un nuevo género teórico e historiográfico, un nuevo modo de acercarse al cine que reivindica la intertextualidad como norma y recurre continuamente, como fuente de inspiración, al ámbito de la filosofía. Por otro, y como consecuencia, contempla el propio hecho cinematográfico como algo no estrictamente cinematográfico, es decir, como él mismo dice, «a la luz, de vez en cuando, de las obras maestras del pensamiento». En este libro, entonces, Kant y Capra, Wittgenstein y McCarey, Emerson y Hawks, Thoreau y Preston Sturges, Rousseau y Cukor, comedias como La fiera de mi niña o Historias de Filadelfia y especulaciones teóricas como las de Freud o Lévi-Strauss, parecen moverse en el mismo terreno, y dan lugar a exégesis fílmicas en las que la historia del cine llega a formar parte de la experiencia cotidiana en la misma medida en que la historia de otras disciplinas forma parte de su presente. Se trata, pues, de hablar de cine desde una herencia cultural común.