PALMER YÁÑEZ, ÓSCAR
Durante los años transcurridos entre el final de la Segunda Guerra Mundial y la irrupción de la televisión como medio de masas, el entretenimiento más popular entre los jóvenes de Estados Unidos fue el cómic. En los quioscos y confiterías de todo el país, centenares de cabeceras competían entre sí por conquistar la atención de sus posibles lectores. Su principal reclamo eran las coloridas, imaginativas, sorprendentes y, en ocasiones, brutales portadas mediante las que algunos de los artistas más destacados y singulares de la época como L. B. Cole, Matt Baker, Lee Elias, Joe Doolin, Jack Kirby, Don Heck, Bernard Baily y Maurice Whitman entre otros marcaron a toda una generación de lectores y futuros autores. Este libro reúne más de cuatrocientas cincuenta.