GARCÍA BLANCO, ANTONIO MARÍA
Las Memorias de un cura liberal exaltado de Antonio María García Blanco constituyen una obra excepcional tanto por su rareza como por su interés como fuente de primera mano para el conocimiento de casi toda la centuria decimonónica. Su larga vida e ingente obra hacen de él una ?rara avis? en el panorama de la intelectualidad española del siglo XIX. Humanista por encima de cualquier otra consideración, practicó sus ideas y dio ejemplo de ellas como párroco rural, en medio de las gentes sencillas del pueblo, como diputado en las Cortes, como profesor eminente en las polémicas universitarias de su tiempo, y como educador infatigable y auténtico. Con dificultad podrá encontrarse un
testimonio autobiográfico comparable por su originalidad y criticismo político, religioso y social, en el que el autor hace de historiador, de novelista, de político y de profeta al ocuparse de lo que ha visto pasar en el siglo XIX: los gobiernos, los reyes, los ministros del altar y del trono, los pobres, los ricos, los caciques, las mujeres, los estultos, los ladrones?
Su autor, nacido en Osuna (Sevilla) en 1800, ha caído en el olvido a pesar de la relevancia que adquirió en su tiempo, después de su paso por la política como diputado exaltado en las Cortes de Mendizábal, como prestigioso catedrático de la Universidad de Madrid y hombre próximo a los políticos e intelectuales progresistas de la época, que no en vano fue maestro reconocido de los presidentes de la Primera República, Salmerón y Castelar (una época todavía aquélla en que ?los
gobernadores, como dijo Don Quijote a Sancho, han de saber por lo menos gramática?). Su militancia política y social extrema ?de buena ley? la simultaneó con el ejercicio inicial del sacerdocio en la Andalucía rural (Sierra de Aracena y campiña sevillana), la magistralía en la catedral hispalense así como, con posterioridad, la política, la participación en el Ateneo madrileño y la enseñanza del hebreo en la Universidad Central de la que fue decano durante el Sexenio revolucionario (1868-1874).