PIÑOL, MARTIN
Nuestra profesora favorita era Emilia. Tenía un perro muy simpático llamado Peludín. Nos enseñaba fotos y vídeos de él, donde parecía sonreír, y siempre le pedíamos que lo llevara a clase, pero la directora no dejaba que los animales entraran en la escuela. Pero un día la señorita Emilia se despertó enferma. Y todo cambió para siempre.