SIERRA / SUBERCASEAUX
Michelle, agnóstica, separada y feminista fue elegida presidenta de Chile, un país católico, conservador y
machista, por amplia mayoría. ¿Un misterio? ¿Un milagro? ¿Un fenómeno difícil de explicar? En el curso de horas y horas
de entrevistas creemos haber obtenido las respuestas a estas interrogantes. Nos habló de su infancia, de su época
universitaria, de la terrible experiencia de la cárcel pinochetista, del exilio, sus amores y desamores, de su trabajo
en los ministerios de Salud y de Defensa, de cómo saltó a la política y por qué aceptó el desafío de ser la primera
mujer que se sienta en el sillón de la presidencia de su país.