GONZALEZ SINDE,ANGELES
Rosanda se había fijado muy bien en el calendario que mamá tenía colgado con imanes en la nevera. Quedaban pocos cuadraditos para que llegaran los Reyes, que vivían muy muy lejos, recibían cartas de cientos, miles, millones de niños, pero su carta era requetenecesaria y tenían que leerla cuanto antes.