SANZ, IGNACIO
Yo tenía diez perritos que estaban siempre jugando. La alegría de mi casa, el orgullo de mi barrio, diez perritos cariñosos, divertidos y simpáticos. Cada perro de una raza, de un tamaño y de un color, más alegres que una fiesta y tan guapos como el sol.
Un canto al amor a nuestras mascotas.